lunes, 29 de noviembre de 2010
Caperucita Roja
miércoles, 17 de noviembre de 2010
Cosas que me contáis
martes, 16 de noviembre de 2010
Una entrada rápida
lunes, 15 de noviembre de 2010
El supermercardo 1ª parte
viernes, 5 de noviembre de 2010
LA CUELA-COLA
“Señorita Pérez, acuda a la caja 3”. Estas palabras despiertan en algunas personas los instintos más primitivos que tenemos.
Os cuento. El pasado lunes estaba haciendo la compra con mi hija Irene, y después de coger los correspondientes yogures bebibles, zumos y demás, nos dirigimos a pagar la compra. Había cuatro personas esperando en cada una de las dos cajas que estaban abiertas, así que me puse detrás de dos señoras que tenían poca compra en su cesta. Aparentemente eran señoras tranquilas, que simplemente estaban realizando la compra diaria. Pero estaba equivocado. De repente la cajera levanto la mirada hacía nosotros, y comprobando la longitud de las colas, dirigió su boca hacía el micrófono, momento en el que empecé a oír un rugido en aumento procedente de las señoras que me precedían. “ …..Perez……3….. “(no pongo lo que dijo porque fue imposible oírlo, pero entiendo que fue la frase con la que he empezado el post de hoy. Comenzó una carrera de obstáculos hacía la caja 3, en la que nada quedó en pié. Lo más grave no fue que todos los chicles y demás chocolatinas ubicados en los exponedores de la compra compulsiva se vinieran abajo, sino que en la lucha encarnizada por hacerse con la pole position en la caja tres, una de las señoras propinó a la otra un codazo en plena nariz, del que, por lo que cuentan en el barrio, todavía no se ha recuperado.
A mi hija Irene le dije que los mayores también jugamos para divertirnos (que le voy a decir)
Para que luego digan que sólo/solo en el coche nos comportamos como animales
jueves, 4 de noviembre de 2010
Nuevas experiencias
Consigo calmar a Faby y le digo que le de un poco de chocolate, mas que nada yo quería saber si eran mimos por la caída o efectivamente le dolía la mano.
Vuelvo a llamar al cabo de un rato, sobra decir que en esos 5 minutos ya había preparado un plan de choque laboral por si me tenía que ir al hospital, es decir había metido en una llave usb una serie de datos que tenía que entregar en un par de horas.
Lo dicho, llamo y que al niño le dolía mucho.
Me monto en el coche y voy a por el niño, le toco la mano y le duele.
Llegamos al hospital.
Mismo ritual que con la brecha de hace un mes.
-que le pasa?
-Se ha caído
-¿altura?
-la suya
-¿que le duele?
-la mano
-Pues espera aquí a que venga un celador para llevaros a trauma.
Esperamos con otra familia con un niño con la muñeca fracturada (o sea rota)
Y llega el celador, y nos lleva a trauma. respecto al celador diré que era del tipo 'yomelosetodo' o 'soycasimedico' porque mientras nos guiaba les pregunta a los de la muñeca rota:
-¿qué le ha pasado? (creo que se conocían)
-Fractura de muñeca, dice el padre
-Es limpia?
-parece que si
-Mejor, con un poco de suerte os vais hoy para casa
He mirado al padre que se le ha cambiado la cara porque no se le había ocurrido el que pudieran ingresar al niño(normal)
Bueno pues por fin llegamos. En la sala de espera una señora me ha dicho que no parecía que le doliera mucho al niño, ni le he contestado claro.
Hemos entrado y nos ha atendido un traumatólogo encantador, ha agarrado la muñeca de ign y me dice,
-Hala ya está
-Y contesto, el qué?
-Que ya está, que le he curado
-Y yo mirándole y pensando si era una sanador o un pasamanos de esos le digo, ¿pero tenía algo?
-pues si, el radio desplazado y ya se lo he puesto bien, le habéis dado un tirón en el brazo?
-Pues es posible al caerse que le hayan agarrado
-Pues eso es, le puede volver a pasar así que tranquila
Y nos hemos ido tan contentos con el radio en su sitio y con nuevas experiencias en la mochila.